Ya sea que viajes en automóvil o en avión, probablemente estés ansiosa por asegurarte de que el primer viaje del bebé transcurra sin problemas. Y eso es comprensible: desde compañeros de asiento malhumorados en clase económica hasta problemas inesperados en el automóvil, hay muchas cosas que pueden complicar tu primer viaje con el bebé.
Pero no entres en pánico todavía. Con un poco de planificación y, por supuesto, un poco de suerte, no hay nada que impida que tu viaje transcurra sin problemas. Estos son algunos pasos que puedes seguir para hacer que viajar sea más fácil.
1. Redactar una lista de verificación previa al viaje
La clave para viajar sin estrés (o con muy poco estrés) con tu bebé es planificar con anticipación. Esto incluye lo obvio como empacar (más detalles a continuación), pero también pensar con anticipación en cosas como cambiadores e instalaciones para mamás que amamantan o extraen leche.
Si vas a volar, una opción que la mayoría de la gente no piensa es llamar a la aerolínea para verificar qué tan espacioso es el avión y consultar el sitio web del aeropuerto para ver cómo son las instalaciones para los papás. Si tu pequeñito es un poco mayor, también puedes ubicar áreas de juego en los aeropuertos a los que volarás. Para los viajes en automóvil, verifica la ruta en busca de lugares aptos para niños donde puedas detenerte en el camino y planifica algunas paradas con frecuencia.
2. Hablemos de empacar
Si estás nerviosa acerca de qué empacar, no te preocupes: el Internet tiene muchísimas listas de verificación de viaje que puedes consultar, por lo que no profundizaremos aquí en demasiados detalles. No olvides lo esencial: ’snacks’, bebidas y toallitas húmedas. Siempre debes empacar más de lo que crees que necesitarás: si tus vuelos se retrasan o tus maletas se pierden, estarás menos estresada si tienes suministros para un día más. Para los viajes en avión, la TSA, la Administración de Seguridad en el Transporte, permite fórmula para bebés o leche materna en el avión en cantidades razonables aprende más aquí en inglés, aunque la examinarán por separado. No olvides el chupón para ayudar a que los oídos de tu bebé se adapten a los cambios de presión.
Si viajas en automóvil y tienes más espacio, es posible que desees elegir algunos juguetes y libros favoritos, varias mudas de ropa para bebés, una muda para ti y bolsas con cierre hermético para la ropa sucia. Joe Rubino, Microbiólogo Jefe de Lysol, también recomienda llevar varios paquetes de viaje de toallitas húmedas desinfectantes, como Lysol Disinfecting Wipes, para ayudar a mantener limpias las superficies en aeropuertos, restaurantes y lugares públicos llenos de gérmenes.
En los últimos años, algunos papás han comenzado a repartir bolsas de obsequios con dulces y tapones para los oídos a sus compañeros de viaje de la aerolínea para disculparse por adelantado por el comportamiento de su pequeñito, y con frecuencia recibir elogios en el Internet. Si esto suena como algo que facilitará tu vuelo, hazlo, pero no te sientas presionada a seguir esta tendencia: todos los bebés lloran y tus compañeros de viaje pueden entenderlo. Tienes suficiente de qué preocuparte sin la presión adicional de hacer que los adultos se sientan mejor acerca del comportamiento normal de un bebé.
3. Bebé sano, feliz viaje
Entonces, has empacado, has planeado y estás lista para que tu familia salga a la carretera. Pero te está picando la garganta, y te ha empezado a doler la cabeza, y es que… ¡achuuu! Sí, estás enferma justo durante el gran viaje familiar. Nada hace que viajar sea menos divertido que enfermarse o viajar con un bebé enfermo y gruñón.
No hay mucho que puedas hacer una vez que te enfermes, pero estos consejos pueden ayudarte a evitarlo. Si es posible, trata de evitar viajar durante la temporada de resfriados y gripe, y mantén al bebé fuera de las áreas con mucha gente. “Incluso después de que los bebés reciben la vacuna contra la gripe, su inmunidad puede tardar un par de meses en activarse”, comenta Joe Rubino, Microbiólogo Jefe de Lysol. Por supuesto, evitar a las personas no siempre es posible si viajas a través de aeropuertos ajetreados y aviones llenos de gente, así que no te sientas culpable si no puedes mantener al bebé alejado de las personas todo el tiempo.
Si viajas a un lugar cálido, asegúrate de que tú y tu bebé beban mucha agua y agrega sombreros y protector solar a tu maleta.
Finalmente, recuerda establecer tus expectativas bajas. Viajar con un bebé nunca va a ser fácil, pero cuanto más organizada estés, más relajados estarán los dos.