Jugando con tu niño es un ganar y ganar: Ambos se benefician. Jugar es una manera de ayudar a tu niño a desarrollarse de diferentes maneras, desde las habilidades del lenguaje hasta las habilidades motoras, las habilidades sociales y el crecimiento emocional. Jugar refuerza el vínculo entre ambos. Y jugar con un niño pequeño es una fuente simple e interminable de alegría y diversión.
Por todas sus ventajas, saber cómo jugar con un niño pequeño no siempre es un proceso natural para los adultos, sin embargo. Es como si, con nuestras vidas ocupadas, nos hubiéramos olvidado cómo vivir el momento y disfrutar de nosotros mismos. Incluso a los padres que les encanta jugar podrían no darse cuenta de la manera de aprovechar al máximo este momento para un niño pequeño. Pero con algunos pocos consejos inteligentes, tú puedes enfocarte en lo que más importa:
- Poner toda tu atención individual al juego con tu niño. Seguramente, en ocasiones necesitas que tu niño juegue sin ti. Pero, proveyendo atención individual total a tu niña pequeña, le darás señales de que la valoras. Cuando juegues, deja el teléfono o la computadora y apaga la televisión. Toma un descanso de todas tus tareas y ponte a jugar de manera total.
- Pon la diversión primero. La mayoría de los juegos de los niños pequeños a esta edad sólo debe centrarse en el placer de la experiencia. Resiste cambiar cada interacción a una oportunidad de aprendizaje, por ejemplo, mediante las preguntas sobre los colores o los discursos. Mucho de lo que aprenden los niños pequeños ocurre naturalmente a medida que hablas, participas, respondes preguntas y simplemente hacen cosas juntos.
- Conéctate con tu niño. Incluso antes de que tu niña pequeña pueda hablar bien, sus expresiones faciales, gestos y sonidos harán claro si ella es receptiva y si la está pasando bien o no. Escucha todas estas señales. Los niños se conectan y absorben más cuando sienten que se les responde y están seguros.
- Aprende como jugar con un niño pequeño de tu niño. Podrías sugerir una actividad o juguete, pero observa lo que tu niño hace con él. Raramente existe una manera correcta de jugar. Déjala que ella te muestre una nueva manera.
- Haz preguntas. Otra manera de evitar asumir el control y mantener interesado a tu niño implica preguntar, en lugar de decir: “¿Qué pasar después?” “¿A dónde fue?” “¿Qué dijo el oso?”
- Ten paciencia a la hora de jugar. A los niños pequeños les encanta hacer cosas como “¡otra vez, otra vez!” Por la repetición es cómo ellos aprenden nuevas ideas y dominan nuevas habilidades. Podrías estar cansado de un juego mucho antes de tu niño pequeño, pero continúa jugando.
- Simplemente déjalo fluir. Está bien, no, es genial ser un poco juguetona al momento de jugar con tu niño pequeño: Sopla burbujas, rueda por el pasto, baila. Cuando tú te estás divirtiendo, tu puedes estar segura que tu niño pequeño también.