Desarrollo del Cerebro de Bebé
Las nuevas tecnologías de imagen han permitido que los neurobiólogos obtengan una gran cantidad de información valiosa sobre los cerebros de adultos y niños vivientes.
Hecho del Cerebro: Los cerebros están listos para aprender desde el nacimiento.
La función y el desarrollo del cerebro humano crece sorprendentemente rápido, empezando desde el primer día en la matriz. Para los 6 años, el cerebro de tu bebé va a ser casi de tamaño adulto. Incluso al nacimiento, los cerebros de los bebés contienen millones de células cerebrales, las cuales se llaman neuronas.
Hecho del Cerebro: Las conexiones del cerebro se fortalecen con experiencia.
Las conexiones del cerebro se llaman sinapsis. Miles y miles de ellas se forman con experiencias de cada día. Las sinapsis son cruciales porque transmiten los impulsos del cerebro, los cuales controlan las funciones del cuerpo, pensando, sintiendo, memoria y lenguaje.
Tu niño pequeño tiene un juguete nuevo, que está explorando con mucha energía. Sus células del cerebro están disparando y nuevas sinapsis pueden ocurrir. Los cerebros de los niños pequeños harán más sinapsis de las que necesita para un buen funcionamiento del cerebro. Las sinapsis que se usan frecuentemente se fortalecerán y serán mantenidas. Las que no, eventualmente desaparecerán. Así que abrazando y leyendo a tu niño pequeño, puedes alentar el crecimiento y fortalecimiento de las conexiones del cerebro.
Hecho del Cerebro: La parte frontal del cerebro está involucrada en conductas orientadas en objetivos.
Un aspecto importante del desarrollo temprano del niño pequeño envuelve un aumento en las conexiones a las neuronas en la parte frontal del cerebro, particularmente el área llamada la corteza pre frontal. Estas conexiones empiezan a aumentar hacia el final del primer año—y continúan hasta el final de la adolescencia. La corteza pre frontal también es algunas veces llamada el área de nuestras "Funciones Ejecutivas" porque está involucrada en muchas conductas dirigidas a objetivos tales como la organización de actividades, planeando, resolviendo problemas y la evaluación de nuestros propios comportamientos. Los niños pequeños muestran los signos tempranos de funcionamiento ejecutivo cuando lentamente y cuidadosamente tratan de emparejar las piezas de un rompecabezas al tablero.